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Gustavo Cárdenas Moreno: Un pedazo de historia del buceo




Para Gustavo Cárdenas Moreno, que es un gran apasionado del buceo, es muy importante que, además de saber con precisión lo que se necesita para la práctica correcta de este deporte; es necesario conocer acerca de la historia del buceo.


Esta historia siempre se debería de tener presente cada vez que uno se sumerge; donde se adentra en los océanos, arrecifes, mares y se vuelve uno con la madre naturaleza.


Breve historia del buceo.


Los seres humanos siempre se han caracterizado por sentir cierta atracción por las profundidades de los océanos. Esto se debe a que en nuestro planeta la gran mayoría es agua en lugar de tierra o sólo es la simple curiosidad por lo que se puede observar en el interior de los mares más grandes.


Se tiene registro que las primeras muestras de los intentos del ser humano por sumergirse en el mar, aparecen siglos antes de Cristo. La prueba más clara es la de un bajorrelieve del año 880 a.d.C., en el que se aprecia al rey persa Assurbanipal II en acritud de nadar y provisto de un odre de carnero bajo su pecho, en forma de saco respirador y junto a él un pez.


La mejor presencia de estos signos de las primeras pruebas junto con historias en ocasiones mezcladas con los mitos y las leyendas, es durante el apogeo del imperio ateniense.


Además, fueron los griegos quienes desarrollaron el primer mecanismo de inmersión: "la lebeta", primitiva campana de buzo.


Durante el Imperio Romano, el pueblo de los "urinatores", se destacaría por su tradición subacuática, que los llevaron a formar las primeras unidades de buceadores de combate.


Prehistoria y Antigüedad


Se tienen indicios de la práctica del buceo en la prehistoria, en los grandes yacimientos de conchas de moluscos, que se han localizado en las costas de Portugal.


Las tribus usaban unas primitivas pero prácticas lentes submarinas, formadas por un armazón de madera sosteniendo una lámina transparente de carey u otro caparazón de tortuga marina.


Las primeras noticias que se tienen de la práctica de la inmersión en los mares son del año 168 A.C., cuando se utilizaron buzos para salvar el tesoro que Perseo, último rey de Macedonia (Grecia), arrojara al mar los tesoros de su palacio.


En los "Inconvenientes" de Aristóteles se refieren dos tipos de aparatos de inmersión, uno de ellos es la "lebeta", un antecedente de la campana de buzo, que consiste en un gran recipiente metálico que se coloca invertido en el agua, lo que permite aprisionar en su interior el volumen de aire que su capacidad admita donde uno o más buzos se acomodan en su interior, desde donde realizan salidas al fondo del mar; el otro instrumento mencionado es un tubo respirador muy parecido al actual snorkel.


Época Moderna


Fue en 1860, cuando un oficial de marina francés, Auguste Denayrouze, y un ingeniero de minas, Benedict Rouquayrol, se unieron para construir un aparato más ligero que la escafandra de buzo.


Este consistía en un depósito metálico que contenía aire a 30 o 40 atmósferas de presión, con un regulador elemental y una manguera que proporcionaba aire desde la superficie y que se podía desconectar por breves espacios de tiempo mientras el buceador seguía respirando de la reserva de su depósito. Le darían el nombre de "Aeróforo".


Este aparato no llegó a utilizarse masivamente ya que admitía escasa autonomía y no disponía de un sistema de visión adecuado.


Siglo XX


En 1930 se crean elementos esenciales para el desarrollo del buceo moderno como las aletas o patas de rana (1935), el tubo respirador (1938) y la máscara que abarca ojos y nariz, patentada en 1938.


En 1943, el equipo formado por el Teniente de Navío francés Jacques-Yves Cousteau, el ingeniero Emile Gagnan, y un joven deportista Frédéric Dumas probarían en aguas de la Costa Azul un aparato que habría de convertirse en aquel con el que tantas generaciones habían soñado.


Desde entonces el buceo a evolucionado mucho en tan poco tiempo, que gracias a los avances de la tecnología hay una gran variedad para meterse al agua, algo que a Gustavo Cárdenas Moreno le gusta mucho.




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